Inflación

La carne aumentó 20% y no hay expectativas de baja

El referente del Centro de Almaceneros e integrante de la Cámara de Comercio, Luis Schreiber, advirtió que el precio de la carne proveniente del norte registró un incremento del 20% entre octubre y noviembre, sin perspectivas de freno debido a la fuerte demanda externa. Aseguró que el aumento contradice los índices oficiales de inflación y profundiza la crisis en los hogares fueguinos.

En comunicación con FM del Pueblo, Schreiber explicó que el valor de la media res llegó con subas consecutivas durante las últimas semanas. “Dicen que la inflación fue del 2%, pero la carne aumentó mucho más. En Argentina el consumo está por el piso, esto pasa porque se la llevan afuera y pagan lo que sea”, afirmó, remarcando que el precio “sigue firme” y no se espera una corrección a la baja.

A este escenario se suma el incremento sostenido de los combustibles, que encarece los costos logísticos y de reposición. “Cada vez que llenás el tanque te sale más caro. No sé cómo toman la inflación”, cuestionó.

El referente comercial describió una situación social crítica que se refleja diariamente en los locales barriales. “La gente entra al almacén persignándose. Antes no llegaban con el efectivo; ahora no llegan ni con la tarjeta. Las tarjetas las rechazan todas”, señaló. Indicó que el endeudamiento crece y que muchos vecinos ya no logran afrontar servicios como luz, gas o aportes.

Schreiber también recordó que la Cámara de Comercio pidió una moratoria a la AREF hace meses, pero la Legislatura recién ahora comenzará a debatirla. “Para cuando venga el salvataje ya se ahogaron varios. Hay negocios que no pudieron esperar y cerraron”, lamentó. Afirmó que la falta de decisiones políticas agrava la situación: “No se sientan a debatir nada, y mientras sigan con chicanas esto va para abajo”.

Durante la entrevista, mencionó que recibió fotos de tres comercios de Río Grande que colocaron carteles de cierre definitivo en sus vidrieras. “Son negocios de 15, 20, 30 años. ¿Qué van a hacer los dueños y los empleados?”, se preguntó. Agregó que la baja rentabilidad impide sostener una estructura mínima: “No podés vivir vendiendo ofertas; lo perecedero ni siquiera lo querés comprar para no tirarlo”.

También se refirió al impacto de la crisis laboral en el país y la provincia, tras los despidos en el sector textil y la caída industrial. “Están arruinando todas las pymes. Hay cierres de punta a punta del país”, afirmó.

Por último, cuestionó el uso oficial de imágenes de playas colmadas como indicador económico. “La gente necesita distraerse, pero los comercios estaban vacíos. Muestran lo que quieren mostrar”, aseguró.

Fuente: Red 23